TRABAJADORES DE CAJs CUENTAN CÓMO HABILITARON OFICINAS EN SUS CASAS PARA GARANTIZAR ATENCIÓN JUDICIAL GRATUITA A USUARIOS
Los más de dos mil funcionarios de las cuatro Corporaciones de Asistencia Judicial (CAJs) del país agrupados bajo el alero de la Federación Nacional de Acceso a la Justicia, FENADAJ, cumplen casi dos meses atendiendo por trabajo remoto desde sus domicilios a los miles de usuarios que pese a la pandemia continúan necesitando asesoría y representación jurídica gratuita en tema penales, civiles, laborales, de familia e infancia.
Orientación Oportuna
Karen Narváez, asistente social de Consultorio Jurídico, lo hace desde Valdivia, desde donde explica que su objetivo es entregar, vía telefónica, «oportuna respuesta y orientación a los usuarios principalmente en materias de familia y civiles», mientras que Carla Merino, del Programa Mi Abogado, lo hace desde su domicilio en Chillán, donde explica que sigue cumpliendo “cada una de las funciones que nos convoca como programa”. Hermann Sickinger Manosalba, abogado auxiliar de la CAjs del Consultorio Civil, lo hace desde Concepción, intentando mantener siempre su buen humor pese a “este tiempo ominoso”, dice.
Metodología laboral
Sebastián Caroca y Úrsula Villarroel, ambos de Puente Alto, coinciden en que la intensidad del trabajo no ha disminuido pese a estar trabajando desde la casa.
La asistente social Úrsula Villarroel dice que ha sido importante «programarse adecuadamente». Para eso, explica que ha dividido su jornada laboral remota en tres: “En las mañanas llamo a los usuarios a quienes les doy las instrucciones telefónicas, lo que ha funcionado bastante bien… de hecho, están agradecidos de no tener que ir al centro”, dice antes de agregar que durante “la segunda parte del día, que va de tres en adelante, procesa los datos, calificaciones y horarios de la agenda de trabajo” para cerrar su jornada, tipo «nueve de la noche, con la elaboración de la agenda de la jornada siguiente».
Barrera tecnológica
Una de las dificultades que este llamado teletrabajo está mostrando, a juicio de la dirigente Gabriela Opazo, de la Oficina de Defensa Laboral Metropolitana, es “conciliar tecnología con todas las personas. No todos tienen las habilidades tecnológicas hoy en día, por ende, ha sido bastante difícil lograr una comunicación eficiente y eficaz con los usuarios”.
Pese a ello, enfatiza “que no hemos dejado de trabajar desde el minuto uno que la Corporación Judicial cerró sus puertas por este contexto” de la pandemia.
Felicitaciones
Para Alexis de Barbieris, de la DG Remuneraciones CAJs Bíobío, habilitar “una improvisada oficina en un rinconcito de mi hogar” es su aporte también para “cuidarmos entre todos”, mientras que para Cecilia Hernando, secretaria de Renca y parte de la Asociación de Funcionarios, Técnicos y Administrativos de la CAJs, no ha habido diferencia “entre trabajar en la oficina y en su casita”, dice aprovechando de enviar felicitaciones a los dirigentes “porque aún estando en pandemia, están pendiente de las reuniones, de la asociación, y de todo eso”, enfatizó.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!